lunes, enero 02, 2006

SIGLOS XV Y XVI






1494. Hernando de Zafra mantuvo siempre bien informados a los Reyes Católicos de todos los asuntos concernientes sobre Melilla y todo el Norte de África. En carta de 25 de Septiembre de 1494 y dirigida a los Reyes por el propio Hernando de Zafra, les comunica que: (...) A legua y media de la fortaleza de Cazaza hay una tierra que se dice el Geber, señora de todas esas tierras y que hará que todos los alábares de aquella comarca sirvan a Vuestras Altezas.

Pedro de Medina nos describe el despoblamiento de Melilla:

(...) Como el rey Don Fernando fuese avisado desto, mandó al Comendador Martín Galindo, que pasase a África, y saltase con gente de tierra, y andoviese el circuito de Melilla, y lo mirase bien y trajese relación dello. El cual fue como la vió tan asolada y destruida, y viese tanta multitud de moros alábares que moraban a la redonda, parecióle que si se poblara que antes sería carnicería de cristianos que población dellos .

Todo esto hizo que los Reyes Católicos perdieran el interés por la conquista de Melilla. Pasando este interés a la Casa Ducal de Medina Sidonia.

Pedro de Medina en su “Crónica de los Muy Excelentes Duques de Medina Sidonia” dice:

Don Juan de Guzmán, Duque de Medina Sidonia, cuando esto supo, como él fuese muy valeroso y deseoso de servir a Dios en la guerra contra los moros, parecióle que si él poblase aquella cibdad, que podría desde allí hacer guerra contínua a los moros y ganarles mas pueblos en África y por ventura sería principios para que se ganasen aquellos reinos de Granada, y seria grande utilidad y provecho destos reinos de España, tener en África una cibdad como Melilla, porque si algunos navíos con tormenta e de otra dieran en la costa de África, supiesen que tenían allí donde se recoger, y así mismo para que muchos captivos cristianos se vendrían a amparar y defender en aquella cibdad, y finalmente no habían de sufrir los cristianos no teniendo moros en España con quien pelear, de no emprender conquista en África, y para esto sería bueno tener un pueblo y puerto seguro donde desembarcar. Y para ganar la cibdad de Fez, estaba allí mejor aparejo que por ninguna parte, por razón de la falta de agua que los cristianos podían tener y por allí hay un río donde mucha parte del camino les podía servir de agua, sin tener della necesidad.

El Duque de Medina Sidonia manda a Don Pedro de Estopiñán acompañado de Francisco Ramírez de Madrid. La participación de este último en la exploración de Melilla, sobre el terreno vió las posibilidades de reconstruir la ciudad. Según Lorenzo de Padilla en su Crónica de Felipe II, llamado El Hermoso, el que acompañó a Estopiñán fue el capitán de artillería, D. Ramiro López.

Algunos historiadores opinan que los barcos que se emplearon en la conquista de Melilla, eran los destinados al nuevo viaje que debía realizar Cristóbal Colón, cosa que irritaba a éste, y muy amargamente se quejaba de ello. Pero lo que verdaderamente hizo el Duque fue contratar todos los navíos de las proximidades de San Lucar de Barrameda.

Decía Colón que se ofrecía más costa y gasto en lo de la defensa de Melilla que en lo que él pedía para proseguir sus descubrimientos y conquistas de tierra firme, pues para sostener aquel lugar parecía que era menester tres mil hombres y con aquella gente no se tenía para mas que guardar Melilla y no para entrar a ofender y continuar la conquista; y que no tenia tal puerto que fuese útil sostenerlo para la guerra de África, por que es allí travesía de Levante, que prevalece en todo el Estrecho más que otro viento.

A pesar de las críticas de Colón, la expedición se llevó a cabo, y mandándola iría Don Pedro Estopiñán. El ingeniero Ramírez de Madrid no figuraba en la misma por estar prestando sus servicios al Rey.

15 de Septiembre de 1497. Salía de San Lucar de Barrameda la expedición llevando gran cantidad de harina, tocino, vino, aceite y carne. Armas como ballestas, lanzas, espingardas y unas maderas que servirían para la construcción de las murallas de la fortaleza, así como cal para el blanqueo del maderamen de las falsas murallas.

17 de Septiembre de 1497. Fecha histórica de la conquista de Melilla por las huestes del Duque de Medina Sidonia y mandadas por D. Pedro Estopiñán.

Este marchó pronto de la ciudad dejando de primer alcaide a Gómez Suárez. El Duque visitó Melilla por orden de la Corona, y desde ese día empezaron las obras de fortificación.

La reacción de los indígenas de Betolla, que eran los que controlaban a los piratas de la zona fue el ataque que infringieron a los nuevos moradores del bastión. Fueron rechazados y mermadas sus fuerzas, ya que se batían con huestes del Duque, entrenadas en la conquista de Granada, soldados profesionales y disciplinados. En uno de estos asaltos a Melilla cayeron muertos el jefe de Betolla y su hermano.

En la Corte de Fez hubo una gran preocupación al tener noticias de la conquista de Melilla por España. Acto seguido, el Sultán Muley Ex Sej mandó una tropa al mando del general Ben Filaly. (¿Sería éste un antepasado del actual ministro marroquí?) Al llegar a Cazaza, éste se encontró un panorama desolador al ver derrotadas todas las fuerzas que habían luchado contra los españoles. Cuando se reorganizaron de nuevo, aparece un personaje llamado Alí Alhatar que se erige como jefe civil, y como militar dependiente de Fez y mando de general en jefe, Ben Filaly. A pesar de todos los preparativos de ataques, éstos siempre se estrellaron contra las murallas defendidas por los españoles.

13 de Abril de 1498. Asiento firmado en Alcalá de Henares entre La Real Hacienda y la Casa Ducal de Medina Sidonia, presentada por los Comendadores D. Pedro de Estopiñán y D. Martín Bocanegra. Se detallan los gastos de personal y material necesarios. Fue el primer presupuesto de la ciudad y en él se establecía, entre otros particulares, que entre la guarnición debían contarse con treinta y cinco oficiales de oficios, carpinteros, herreros, pedreros, albañiles y canteros.

Otrosí debemos de mandar librar al dicho duque este año un cuento (un millón) de maravedíes para las labores que se han de hacer en la dicha cibdad de Melilla, en la Iglesia, y en las casas é en los baluartes, e empetrillar, e almenar e adobar las torres, é cerrar la parte de la mar lo que fuese menester, el cual se ha de librar en las dhas cibdades de Sevilla y Jerez y sus comarcas (...).

El Duque se compromete a abastecer la Plaza por seis meses, percibiendo la Tenencia de la Ciudad, facultado para nombrar Alcaides y Justicias. Setecientos hombres y cincuenta caballos fueron la plantilla de la Plaza.

El Rey y la Reina: Lo que por nuestro mandato se asentó con el Duque de Medina Sidonia; e con Don Pedro Estopiñán, su contador, e con Martín Bocanegra, alcaide de Medina Sidonia, ambos en su nombre, para la guarda e proveimiento de la cibdad de Melilla es lo siguiente: Primeramente, que Nos mandamos dar cargo al dicho Duque de la tenencia e guarda de la dicha cibdad de Melilla, porque la tenga por Nos cuanto Nuestra merced y voluntad fuere (...).

6 de Septiembre de 1498. Los Reyes Católicos dirigen una carta al Duque en la que se quejaban de que en Melilla no se habían empezado aún las obras, habiendo mandado ese cuento de dinero.

(...) Se vos libró un cuento para las obras que allí se hobiesen dehacer, y he sabido que hasta agora no habeis enviado a que se atienda en las labores que allí se han de hacer, ni menos ningún oficial destos es allí ido (...).

12 de Octubre de 1504. El Testamento, firmado por Isabel la Católica en Medina del Campo, decía entre otras cosas: (...) Que no cesen de la conquista de África e de pugnar por la fe contra los infieles.

26 de Noviembre de 1504. Fallece Isabel I La Católica.

13 de Septiembre de 1505. El Duque de Medina Sidonia ocupa Cazaza y Mazalquivir con soldados procedentes de Melilla.

1506. Gonzalo Mariño de Rivera es Gobernador de Melilla, dependiendo del Duque de Medina Sidonia. Más tarde lo sería el Marqués de Tarifa.

23 de Julio de 1508. El Peñón de Vélez es ocupado por España.

18 de Mayo de 1509. Orán es ocupado por España.

6 de Enero de 1510. Trípoli es ocupado por España.

1525. A mediados de este año, el Rey Carlos I mostró un desinterés por Melilla, debido a haber ganado las Plazas de Orán, Trípoli, Bujía y Mazalquivir. Que por tanto se podría derribar la ciudad y excusar la costa que allí se hacía, aun cuando, porque no pareciese que se abandonaba del todo cosa que se había ganado y sostenido en África, determino reducir la ciudad a una buena fortaleza, que se hiciese en ella, donde residiese cierto número de gente y un atajo fuerte que facilmente pudiese defenderse, porque la Plaza de Melilla es de mas gasto que provecho (...).

Ese fue el primer comentario en contra de la posesión de Melilla, y lo hizo nuestro Emperador Carlos I movido por las circunstancias de la guerra y en aquellos años tan gloriosos para España, ahora lo hace cualquier político confundiendo lo que es una Colonia y lo que es territorio nacional, movido por egoísmo partidista y sin tener idea de lo que dice, y mucha gente, ignorando la historia se lo cree a fondo.

1527. Se efectúa un nuevo Asiento por la Real Hacienda, entre el Emperador y D. Alfonso Pérez de Guzmán, Duque de Medina Sidonia, para la guarda y proveimiento de la ciudad de Melilla. En este Asiento se disminuía la capacidad defensiva y el número de soldados, llegando a 40 caballeros, 10 artilleros, 150 infantes, y otros oficios especiales.

En este año llega a Melilla Fray Gabriel Tadino de Martinengo. Era jefe de Artillería española y conocía la ingeniería de las fortalezas del Reino, llegando a construirse, durante su destino en la ciudad, el torreón de San Sebastián, de 24 varas de altura, y repararse el de las Pelotas, Cruces, Hombres de Campo, Muñiz y Camacha. El veedor de la ciudad era D. Hernando de Bustillo.

14 de Julio de 1535. Túnez es ocupado por España.

1535-1542. D. Cristóbal Dabrés es Gobernador de Melilla durante ese período dependiendo del Duque de Medina Sidonia.

1543-1546. D. Hernando de Jerez es Gobernador de Melilla dependiendo del Duque de Medina Sidonia.

1546-1554. D. Juan de Perea es Gobernador de Melilla dependiendo del Duque dee Medina Sidonia.

1549. Bernardino de Mendoza proyecta el traslado de la Plaza a la Laguna cercana, (Mar Chica), pero viendo que no es viable tal proyecto se decide fortificar con todas las fuerzas la antigua ciudad. La Ciudad se vería visitada por el Rey de Dugudú, actual Debdou, Marruecos para que nos entendamos. También el de Vélez la visitó, debido a que no tenía mas remedio que refugiarse por las luchas intestinas y dinásticas que existían en esos reinos. Ya empezaba España a ser benefactora con su vecino.

15 de Marzo de 1549. Miguel de Perea llega de la Península para hacerse cargo de los trabajos de fortificación de la Ciudad. Este era capitán al servicio de la Corona en 1525, Maestro de Trincheras en 1526, y al año siguiente, Capitán General de Artillería. Bartolomé Dorador en carta dirigida a Maximiliano y María de Austria, entre otras cosas les dice:

(...) La fortificación desta cibdad anda de muy grand priesa, pues D. Miguel de Perea lo haze con toda diligencia (...).

Se ahonda el foso de Santiago para obtener piedra. Se reedifica el Frente de Tierra o Batería Real, y también se arrasa la Villa vieja y la primera Iglesia de San Miguel junto con la primera casa del Gobernador.


Puerta de Santiago

Por esta época Francisco Verdugo, desde Málaga, era el encargado de organizar las partidas y envíos hacia Melilla. Las partidas para extraer el dinero destinado a la Plaza provenían del llamado Juro de Melilla. Era un modo de encauzar todo el dinero estatal hacia Málaga; el Proveedor y Pagador de las Armadas de su Majestad se encargaban de que todo ese dinero lo recibiesen los residentes en la Plaza. Pienso que será lo mismo que ocurre actualmente con las partidas que se destinan a Melilla de los Presupuestos Generales del Estado.

4 de Febrero de 1550. El veedor de Melilla, Bartolomé Dorador, ante la situación de hambre tan acuciante que había en la plaza, escribe una carta a los príncipes regentes en la que decía:

Muy poderosos señores, La gente que de presente está en esta plaza, así de pie como de cavallo, son trecientos sesenta y cinco, entrellos son treynta y dos a cavallo, ...a dos o tres meses que no comen sino bizcocho; y si este oviera faltado, no dexara de averse padecido mas (...).

24 de Julio de 1550. Llegan a los alrededores de la ciudad cuatro caídes desde Fez para apresar al Rey de Debdou, hallándose éste refugiado en la Villa Vieja. Desde el cerro de la Orca, los caídes hacen un plan de ataque para apresar al Rey, pero desisten de ello al ver lo inexpugnable que eran las murallas.

(...) La obra anda floja por falta de cal y porque la gente no ha tenido que comer dos meses y an estado enfermos muchos.

Fragmento de una carta de Miguel de Perea a Maximiliano y María de Austria. También hay que añadir que los hombres tuvieron que hacer guardia y dividirse para impedir la captura del Rey de Debdou por los caídes. Si éstos se hubieran percatado de estas anomalías, por seguro que los residentes en la Plaza las hubieran pasado muy mal.

27 de Abril de 1551. Muere en Melilla Miguel de Perea, y es nombrado maestro de obras Sancho de Escalante.


Torreón del Bonete

21 de Octubre de 1553. El turco Salah Rais con dos galeras, nueve galeotas, y veinte piezas de artillería, se dirige al mismo Fez para mezclarse en la política de éste. Desde Melilla es observado este desembarco en La Laguna, (Mar Chica) y se teme por la seguridad de la Plaza. Me imagino la zozobra de los españoles al observar ese desembarco con todos los pertrechos y ver el estado en que estaban las murallas de la Ciudad. Los torreones de la parte del mar, Cabras, Bernal Francés, Pelotas y Cruces eran unos turrioncillos chequitos y unas almenas que hay que derribar, porque se estan cayendo, y hazerle un petril talusado (...). Que es lo que vemos actualmente cuando nos asomamos a la borda del barco a su llegada a Melilla, aunque actualmente estos torreones no están como lo describían en aquellos años. Por la parte de la Ensenada de los Galápagos, Muralla a la Vieja Villa, Batería Real, hasta el Espolón: (...) alçar el terrapleno desde la Ampolleta nueba...asta la biexa y el lienço que ba al turrión de Sancti Espiritu que cubra el Padrastro, porque está muy baxo (...). Así que ya podían temer los españoles al turco.


Muralla Real, Ensenada de los Galápagos o de los Viejos y Torreón del Bonete


16 de Enero de 1556. A renuncia de su padre, Carlos I, sube al trono de España Felipe II, y algunos meses después, el 7 de Junio, la ciudad pasa de ser ciudad de señorío a ser ciudad de realengo por una cesión solemne del Duque de Medina Sidonia. Esta cesión era debido a la apatía y la gran pena que sentía el Duque por la muerte prematura del Conde de Niebla, su hijo.

7 de Junio de 1556. Se firman nuevas Capitulaciones y los Duques renuncian a la tenencia de Melilla en favor de la Corona, pasando la ciudad a ser de realengo con alcaide de tal rango:

(...) Se le confiere el mismo trato que las demás tierras de nuestros reinos y favorecimientos de nuestros subditos de aquellas plazas tenidos con gran estima y aprecio.

La entrada de moros en la Plaza estaba prohibida, al igual que los cristianos les estaba vedada la entrada en campo fronterizo.

20 de Junio de 1556. El Rey confirma en su puesto al Alcaide D. Alfonso de Gurrea.

12 de Marzo de 1557. El Veedor de la Plaza, Hernando de Bustillo, acusa a Alfonso de Gurrea de ser imprudente cuando éste salió el día 7 del mismo mes y los moros mataron a 20 soldados, resultando herido de gravedad el propio Gurrea. Su amigo Bartolomé Dorador, lo felicitó por el Hecho cuando se supo que el Alcaide había derrotado a los moros.

6 de Noviembre de 1557. Para acabar con toda esta serie de tropelías, el Alcaide Gurrea pacta con los moros de la serranía de la Alcalahia una Alafhia, Paz o Tregua, (...) con que se les obligó a pagar una cantidad de trigo, cevada, miel y cera, a proporción de un caiz de simiente por yunta. A la manutención y defensa de la Plaza y permisos para sus labranzas, pastos, agua y comercio, vendiendo sus efectos en la que oy se llama Plaza de Armas.

Esto era lo que venían haciendo los moros amigos cada mañana en la Puerta del Campo, vender sus productos de huerta a los españoles, lo que siempre han hecho, y actualmente lo vemos en los mercados de Melilla.


Plaza del Gobernador o del Reloj

28 de Febrero de 1561. Es nombrado Alcaide D. Pedro Benegas de Córdoba, con un sueldo de 800 ducados anuales.

1564. En los cuatro años siguientes los costes de soldados y guarniciones de los presidios del Peñón de Vélez de la Gomera son 12.000 ducados anuales, Melilla con 19.000, Orán-Mazalquivir con 90.000 y La Goleta con 88.000. Vemos que la desproporción es abismal, y todo es debido a la amenaza turca de los presidios mas alejados, y por tanto mas expuestos a los ataques.

16 de Abril de 1564. El Morabito y sus secuaces penetran en la Plaza por el Foso del Hornabeque y son rechazados. Este suceso dio origen a que Juan Ruiz de Alarcón, setenta años mas tarde, publicara la famosa Manganilla de Melilla.

El Morabito era un santón, especie de sacerdote, que tenía a los fronterizos dominados con su Baraca, especie de suerte. Les dijo que podrían entrar en la Plaza sin ser vistos ni oídos, gracias a ella. Don Pedro Benegas que tenía confidentes fuera de Melilla, puso un plan muy simple: que los centinelas se hicieran los dormidos, y una vez los moros dentro del recinto, atacarlos sin dilación. Eso fue todo lo que aconteció ese día.

19 de Junio de 1564. Repiten el intento y son nuevamente rechazados.

Agosto 1566. Bula Pontificia autorizando el nombramiento de Vicario y Curas para Melilla.

1568. D. Francisco Sánchez de Córdoba es nombrado Alcaide Gobernador por S. M. .

1569. D. Juan de Austria penetra en la Laguna de Melilla (Mar Chica).

1570. Benegas de Córdoba construye una torre extramuros para vigilar los huertos de Melilla.

1 de Febrero de 1571. Se cierran los algibes que hay debajo de la Plaza de Armas. En el siglo XVIII, el melillense Juan Antonio de Estrada decía de ellos: Los algibes baxo de la Plaza del Gobernador son los mejores que hasta aquí se han visto en primor, firmeza y arte. Hacen el agua clara, delgada y fresca .

El que les escribe, siendo un niño al que le gustaba recorrer toda Melilla la Vieja, El Pueblo, cuando subía por la Puerta de la Marina, gustaba de asomarme a la batería de San Felipe, justo encima del Torreón de la Cal, para así contemplar toda la dársena del Puerto y la Melilla moderna. Los algibes, siempre que éstos estaban abiertos, me llamaban la atención, con gran riesgo por mi parte, por la peligrosidad que entraña esa bóveda tan grande, toda llena de agua y oscuridad. La verdad era que imponían bastante respeto, o más bien miedo al escuchar tu propia voz repetida por el eco del embovedado. A la Puerta de la Marina le tengo dedicado un pequeño poema en recuerdo de aquellos años felices y peligrosos. Recuerdo que era un soldado de Regulares el que me auxilió y ayudó al verme con las rodillas ensangrentadas por el resbalón que di en la escalera construida en 1914 en sustitución de otra de madera que daba al Torreón de la Cal, hoy derribada. Actualmente se sube a este torreón por la rampa-escalera que existe donde tiempo atrás estaba la puerta de la Compañía de Mar; también se puede acceder por la escalera de lado contrario.


Subiendo por la Puerta de la Marina
siendo chico
en sus escaleras caí.
En la cuesta de los algibes
ante un militar me dolí.
Éste, al verme lloroso
me acarició.
Ahora mi espíritu
vive ese recuerdo.
¿Sería este soldado, aquél,
que con espada, calzas y lanzas
Melilla conquistó ?.
Me dicen, que aquél
era hermano de este,
y eran españoles como yo.


Puerta de la Marina

4 de Diciembre de 1571. D. Antonio de Tejada es nombrado Gobernador.

1574. Los rumores de que los turcos pensaban apoderarse de la Laguna o Mar Chica hace que Felipe II ordene a Vaspasiano de Gonzaga Colonna, Virrey de Navarra, hiciera un reconocimiento de la zona para ver si se puede construir un fuerte para su defensa. El estado del terreno hizo inútil la empresa por ser imposible la entrada, por la bocana arenosa, de barcos en la misma Laguna.

1575. Se construyen los Fuertes exteriores de San Francisco, San Marcos y San Pedro de la Albarrada. Este último, según Gabriel de Morales, estaba situado en el principio del Polígono, Río de la Olla y la Cañada del Cementerio, aproximadamente en la actual Plaza del Comandante Benitez

1576. Un Breve Pontificio asigna la ciudad de Melilla al Obispado de Málaga.

25 de Marzo de 1579. Real Decreto concediendo ayudas suplementarias para reparar el templo. Esto fue debido a que meses antes se dejó sentir un terremoto en Melilla que destruyó varias casas y la Iglesia, y lo que actualmente es la Bocana de la Mar Chica se abrió mas hacia el mar, dejando pasar agua hasta confundirse con el mar abierto.



Fuerte de San Lorenzo

1595. Real Cédula en la que dice: (...) Estas mujeres deben tener el candil encendido hasta dos horas de la noche. Se refiere a que las mujeres que comerciaban con sus cuerpos con los componentes de la guarnición eran las únicas que tenían permiso para tener encendida la luz hasta la madrugada. Pero no permitía los amancebamientos: (...) No beben estar amancebados porque en caso contrario el Alcaide los castigará con rigor.

Este mismo año es nombrado D. Jerónimo de los Barrios Gobernador.

1596. D. Martín Dávalos Padilla es nombrado Gobernador.